Después de presentar al Daytona Concept en el SEMA del año pasado, HPP se ha decidido a fabricar el paquete de personalización que convierte al Dodge Challenger 2010 en la ‘encarnación' del Plymouth Superbird y Road Runner, carros que marcaron la época de los muscle car.
Toda las modificaciones intentan ser lo más fiel al Plymouth original, por lo cual han cambiado todo el frontal, parte de la zona trasera, el parachoques trasero, los rines (de 20 pulgadas), e incluso le han colocado las nervaduras laterales y el gigantesco spoiler que lo caracterizó siempre. El interior también recibe nuevos instrumentos, y la palanca de cambio obtiene especial atención. El costo de este paquete es de 16,395 dólares.
A este precio base se le pueden agregar algunas opciones, como toma de aire real (2,391 a 2,835 dólares), deflectores adicionales (de 2,490 a 3,584), tablero del color de la carrocería (450) y sillas de competición (2,700).
Pero también ofrecen opciones para mejorar el rendimiento, siempre y cuando el Challenger del cual parta el trabajo de HPP sea el SRT-8 de motor 6.1 litros. Ofrece tres diferentes supercargadores (7,149 a 7,388), tres diferentes suspensiones KW (2,025 a 3,595) y un sistema de escape Magnaflow (1,460). En total, si quieres todos los opcionales, el trabajo de HPP podría costar 41,461 dólares, sin incluir al Challenger.
Lo que veremos en París estará aún en etapa de prototipo, pero sin duda lograremos inferir muchas de las características definitivas, entre ellas el propulsor.
El sempiterno pero querido cinco cilindros de 2.5 litros ya está reposando en su tumba al no estar produciéndose más, sin embargo la extensa gama EcoBoost es la solución a este inconveniente, pues con un cilindro menos y emisiones y consumos más favorables es de esperarse que ofrezca cifras de potencia y torque superiores.
El saliente Focus ST declara 225 caballos, por lo cual su sucesor podría alcanzar unos 250 o 260. Esperamos no quedar decepcionados una vez lo veamos en septiembre.
Construido sobre la plataforma del Jeep Rubicon, el Jeep Wrangler Call of Duty: MW3 2012 tiene un motor 3.6 litros V6 Pentastar con 285 caballos de fuerza y 260 libras-pie de torque.
El Jeep Wrangler Call of Duty: MW3 2012 cuenta con una caja de transferencia Rock-Trac y una relación baja de 4:1 que le permite circular a baja velocidad para tener un mayor control e incrementar la cantidad de torque disponible en las ruedas.
El sistema de desconexión de la barra estabilizadora delantera, permite que con solo mover un interruptor, la barra automáticamente se desacople al conducir debajo de los 30 km/h en modo 4WD low (4LO), lo cual permite a las ruedas delanteras descender y comprimirse hasta un 25% más.
El exterior del vehículo se distingue por las placas metálicas con el logo de Call of Duty, un nuevo diseño en el cofre, defensa delantera de uso rudo con lámparas de niebla, rines de aluminio de 17” en color negro, estribos tubulares laterales “Rock Rail”, protectores de lámparas traseras en color negro, defensa trasera de uso rudo, tapa del tanque de gasolina en color negro, y cubierta de la llanta de refacción.
Esta es una edición especial cuya producción estará limitada a 100 vehículos en el país.