En busca de persuadir a los ciudadanos rusos que conducen en estado de ebriedad, las autoridades han elaborado una gigantesca botella metálica con restos de autos accidentados en su interior. Es una estructura de 40 pies de alto, que será colocada como valla en una de las autopistas más transitadas del país. ¿Publicidad extremista o impactantemente necesaria?